Las Maravillosas Manos

 

Por favor extienda sus manos abiertas colóquelas frente a usted y mirelas bien, pues se trata de las partes de la anatomía humana más íntimamente asociadas con nuestra personalidad y conducta, con las manos jugamos, trabajamos, acariciamos, curamos, nos comunicamos y expresamos sentimientos, edificamos civilizaciones, nos defendemos y ejecutamos obras de arte, así como dos manos unidas simbolizan fe y espiritualidad amor y amistad, un puño rígido representa amenaza y violencia. La mano ese fantástico miembro que es dirigido por el cerebro hace su aparición en el tercer mes del embarazo y a partir de ese momento se transformará en uno de los instrumentos más complejos imaginables, un intrincado o dispositivo mecánico compuesto de tendones huesos y fibras nerviosas tan sensibles que son capaces de ejecutar millares de tareas, a cual más compleja con impresionante precisión. 

Si se toma en cuenta que para ejecutar los movimientos más elementales, se pone en juego toda una serie de músculos tendones y articulaciones desde el hombro hasta la yema de los dedos, llena de maravillado asombro imaginarse el intrincado mecanismo de músculos nervios y tendones que deben actuar para que las manos de un pianista ejecuten piezas musicales, se trata de un complejo mecanismo en el cual el cerebro lee las notas diabólicamente complicadas e impresas en la partitura de manera instantánea las dirige así mira e interpreta, al tiempo que ordena a los dedos de las manos que transmitan a las teclas la exacta presión ritmo y duración necesarias para que a medida que vuelan sobre el teclado transformen esas notas escritas en la gloriosa cascada sonora. La mano está llena de huesos 8 en la muñeca, 5 en la palma y 14 en los dedos, sus ligamentos son cordones fibrosos que unen esos huesos de la mano y la muñeca a los músculos que los accionan, con solo dos dedos un cirujano puede hacer intrincados nudos dentro de un corazón humano, y con igual destreza cualquier joven puede con una sola mano hacer que sus dedos presionen velozmente las diminutas teclas de un celular, bien para marcar un número o un mensaje de texto. Basta ver a cortadores de diamantes, virtuosos del violín, guitarra clásica, así como expertos mecanógrafos en teclados de computadoras e incluso avilés carteristas. Para admirar aún más a este asombroso y sensitivo mecanismo de manos y dedos cuya piel aparte de muy resistente es prodigiosa mente elástica y sensible, y esto último se debe a que la palma y sobre todo la punta de los dedos están dotados de singulares aparatos sensores, conteniendo millones de células nerviosas así que tomando en cuenta todo lo anterior y escuchando a manos maestras ejecutar complejas piezas, es que comprendemos cabalmente cómo las manos deben ser consideradas no sólo como vehículo principal del pensamiento, sino aliado del cerebro en la función insólita y cada vez más apasionante, de elevar al ser humano por encima del resto de las criaturas que forman al reino animal.